Entrevista realizada por Lola Robles en Octubre de 2016
Pregunta.
Mi primera pregunta se refiere a tus comienzos como lectora y escritora.
¿Cuándo se iniciaron para ti estas dos aficiones? ¿Te apetece hablarnos de tu
infancia?
Respuesta.
Nací en una casa de la cual te adjunto una foto, grande, rodeada de jardín y
árboles y que tenía torreón, desván, buhardilla y sótano, en un pueblo en las
afueras de Barcelona. Recuerdo los árboles, la cantidad de flores, de libros: literatura,
novelas, cuentos, poesía, historia, geografía, libros de arte…
Mis abuelos contándonos historias; mi madre
empeñada en que aprendiéramos a leer
pronto, prontísimo, (no fuera a haber otra guerra…), mi padre con sus
libros de arte y comprándonos cuentos, tebeos, libros, revistas literarias. Creo
que todo eso fue el germen. Aún guardo revistas, cuentos, libros de aquella
época. Yo escribí poesía, algún cuento; empecé una novela en plan “Mujercitas”,
que prudentemente rompí a los quince
años.
Pregunta
El primer relato que publicaste fue “La
crisálida”, en la revista Nueva Dimensión
nº140, en diciembre de 1981. ¿Cómo fue esa historia?
Respuesta
Había
escrito La Crisálida en la playa, mi marido nadando con mis hijos y yo en la
arena escribiendo con un boli en un
cuaderno rojo, que por cierto, el investigador mexicano Miguel Ángel Fernández
hizo llegar a la Universidad del Sur de Florida (Estados Unidos). Allí está
guardado el Cuaderno Rojo con el original de este cuento, escrito a mano.
Lo llevé, ahora escrito en la máquina de escribir, a Ediciones Dronte, un
sábado por la mañana acompañada de mis hijos y una sobrina. Al joven que abrió
la puerta con cara de asombro, pues la editorial estaba cerrada ese día, le
ofrecí unos cuentos entre los que estaba La Crisálida.
Abrió la puerta y me mostró montones y montones de
cuentos que tenía que leer ese fin de semana. Resulta que se había encerrado a
leer. Entonces le propuse:
“¿Por qué no empieza leyendo el mío? Si no le gusta lo
aparta y si es que sí, se pasa un rato divertido”.
La verdad es que la propuesta era un poco disparatada,
sólo justificada por el entusiasmo literario que nos posee a los escritores,
pero amablemente dijo que sí. Unos meses más tarde recibí por correo unos
ejemplares del nº 140 de Nueva Dimensión con La Crisálida publicada. Al Braker
y Whissita Reed, acababan de nacer.
Pregunta
Posteriormente te trasladaste a vivir a México. ¿Cómo es el mundo de la ciencia
ficción mexicana? ¿Se lee mucha ciencia ficción allí? ¿Qué autores y autoras
destacarías?
Respuesta
No
te podría contestar con mucho detalle pues yo entré en contacto con la ciencia
ficción mexicana a través de la revista Asimov Ciencia Ficción en el 95.
Respecto a mí fue un mundo muy creativo, estimulante, rico. Los compañeros
decían que no se leía mucha ciencia ficción, pero eso creo que es mal general.
Conocí, entre otros, a autores muy interesantes como Aldo
Alba, Libia Brenda Castro, Martha Camacho, Ricardo Guzmán Wolffer, Gerardo
Horacio Porcayo, Gabriel Trujillo Muñoz. Trabajaban cuento, novela o ensayo e
incluso diferentes géneros. Sé que había otros grupos y en cada uno de ellos,
escritores con aportaciones y un intenso trabajo de difusión del género, como
H. Pascal.
Pregunta
Háblanos, por favor del Orfeó Català de Mèxic y tu relación con él.
Respuesta
Hubo momento en nuestra vida en México en que mi esposo y yo nos hicimos socios
del Orfeó. En una ocasión me invitaron a formar parte de la Junta Directiva.
Acepté y fue una experiencia muy enriquecedora. En diferentes tiempos, presenté
a la Junta directiva las siguientes propuestas: 1) Publicar la colección “Diálogo entre Culturas”, dedicada a
catalanes y mexicanos. 2) Organizar un Concurso
de Relato Breve. Aceptaron ambas propuestas, que llevamos a cabo
durante unos diez años, recibiendo cuentos
a nivel internacional.
Pregunta
También nos gustaría que nos contaras algo sobre la Associació d’Escriptors
Tirant lo Blanc, qué era, cómo funcionaba, cómo te vinculaste a esta asociación.
Respuesta
Soy socia fundadora. Con otras escritoras y escritores mexicanos y catalanes,
nos reuníamos, y fundamos la Asociación de Escritores Tirant lo Blanc con sede
en el Orfeó Catalán de México, que nos apoyó y nos facilitó el espacio para nuestras
presentaciones y talleres. Esta Asociación aún existe y sigue funcionando. Cada
año publicamos entre todas, dos o tres antologías de cuentos al año. Vamos por
el número 28.
En un viaje a Barcelona
fundé la Asociación de Escritores Tirant lo Blanc de Catalunya, invitando a
escritores de ambos países. También, aunque no me era posible participar en
ella, esta Asociación ha seguido publicando, dando difusión a la
cultura y en contacto con la de
México.
Pregunta
Fuiste también editora de una pequeña
editorial independiente, El taller ¿cómo
funcionaba la editorial y qué publicaba?
Respuesta
El Taller fue un vuelo corto, que
iniciamos Miguel Pujol y yo. Publicamos Difrentes
(cuentos de ciencia ficción). Flores
Nocturnas (cuentos de vampiras), un Libro de Viajes, Las maniobras ocultas de Mary Acosta; la novela El
Manuscrito Florentino que escribí en coautoría con Aldo Alba.
Las antologías reunían a autores mexicanos y
catalanes. A algunos de ellos les ha publicado posteriormente José Joaquín Ramos
en su revista Alfa Eridiani (Martha Camacho, Elena Pujol, Pedro Paunero…)
Pregunta
En México también diste cursos sobre ciencia ficción y publicaste un libro de
ensayo, Ficción prospectiva (2005).
Nos interesaría saber también de esta parte de tu obra y de tus actividades.
Respuesta
El
escritor y pintor Pedro Bayona me contactó para invitarme a dar clase en el Instituto
Superior de Estudios Prospectivos) de la Ciudad de México. La materia era Ficción Predictiva para la licenciatura
en Prospectiva. El director el Dr. Adip Sabag. Acepté y ser profesora en el
Instituto fue, de nuevo, una experiencia muy enriquecedora. El ISEP publicó el
breve libro Ficción Prospectiva, que recogía algunos de mis artículos de
ciencia ficción.
Pregunta
Vamos ahora a las obras que publicaste
en aquel país: por un lado tenemos los libros de cuentos Cuentos del Archivo Hurus (1998) y Archivo Hurus II (2002). Siempre has cultivado con especial
atención el relato. ¿Te gusta o interesa más que la novela? ¿Has tenido más
dificultades para publicarlos?
Respuesta
En realidad, no, no me interesa el
relato más que la novela. El interés va
parejo. Pienso que el cuento es la
esencia y la novela la vida. He
disfrutado leyendo cuentos como Una
Odisea Marciana de S. G. Wienbaum y
Pequeños actos de amor de Libia Brenda Castro o Nexo Joe de Elena Pujol, o Cibergolem
de Martha Camacho y también he disfrutado mucho, con novelas como Middlemarch de George Elliot, o El despertar de Kate Chopin o El extranjero de Albert Camus.
Como anécdota te comentaré que en 1998, Editorial
Llaca publicó la novela La era de los
clones y ediciones El Ermitaño Cuentos
del Archivo Hurus, casi al mismo tiempo.
Creo que es más fácil
publicar cuento, pues lo puedes publicar en diferentes espacios: revistas,
antologías. También hay una ventaja en el cuento: la practicidad; puedes escribir
cincuenta cuentos. Pero para escribir cincuenta novelas se requiere una
exigencia de espacio-tiempo-energía mucho más considerable.
Pregunta
¿De dónde surgió la idea de los “Archivos Hurus”?
Respuesta
De
mis neuronas, ya sabes: las partículas en marcha, la electricidad, la chispa que
se abre y salta (je, je). En serio, ¿recuerdas la buhardilla en el torreón de mi casa?. Allí estaba la
fragua, el taller del alquimista. Sentada en el suelo, rodeada de libros. ¿Un
torreón?, ¿una micro-biblioteca?, ¿historias medievales? ¿El futuro? Era un Archivo Hurus. Y luego lo
trasladé al espacio con esas características de Monasterio Medieval, de
Biblioteca. “… lugar donde se recogen
todos los conocimientos de las galaxias, donde se da asilo al perseguido…”
Pregunta
En cuanto a la novela La era de los clones (1998) ¿Puedes
comentarnos algo sobre ella y sus avatares posteriores, pues después se ha
publicado en catalán con el título Els
fills de l’atzar (2012) y en
castellano, pero ya en España, como A la
sombra de Mercurio (2014)?
Respuesta
Sí,
se publicó en México. La novela primigenia
era A la sombra de Mercurio con unas
doscientas cincuenta páginas. La editorial iba a sacar una colección de ciencia
ficción. Aceptaron la novela, firmamos contrato; en fin todos los pasos ya
resueltos cuando avisaron de que no podían publicarla tan extensa. Me quedé
perpleja. Lo pensé y decidí que cada asunto tiene su tiempo. Me quedé trabajando
toda la noche. La volví a entregar reducida a unas cien páginas; había quitado
toda la aventura central: la aventura mercuriana;
por lo tanto había que quitar la referencia a Mercurio. H. Pascal, el escritor
que se había encargado de presentarnos a la editorial, sugirió La era de los clones. Me pareció muy
adecuado. La novela salió y se vendieron todos los ejemplares distribuidos.
Después, en Barcelona
fue Pilar Daniel, quien llevó de nuevo la versión íntegra de esta novela a
un editor; ella misma la tradujo a
catalán y Editorial Pagés la publicó, pero de nuevo el editor sugirió otro
título: Els Fills de l´Atzar, pues
así llaman los clones a los humanos en esta novela. Bien, así quedó.
Por tercera vez fue publicada y por primera vez salió con su título original: A la sombra de Mercurio. Ahora el
editor fue José Joaquín Ramos, de Erídano, en Madrid.
Tengo en mente que en una cuarta edición retomaré el
título de La era de los clones. Me
gusta y tengo la impresión que es el título que más ha gustado.
Pregunta
¿Algo más que quieras decirnos sobre tu
vida en México? ¿Cuándo regresaste a España? ¿Sigues teniendo relación con
México y su ciencia ficción?
Respuesta
Mi vida en México con mi familia estuvo muy bien; viajamos y conocimos México
que es una maravilla. Tuve suerte con los amigos en el Orfeó, en el ISEP, en
Asimov Ciencia Ficción, que fue el reinicio y el empuje. Conocí gente creativa,
escritores con los que nos reuníamos, ya sabes, las horas alrededor del café y
todo eso que permanece.
La última vez que fui a México fue a finales del 2014
¡Cuánto tiempo!, pero eso no quiere decir que haya regresado totalmente pues la relación permanece. Este año, me han invitado desde México a
participar en antologías. En su libro Utopías
y Quimeras, el Dr. Gabriel Trujillo Muñoz me hizo el honor de dedicar un
capítulo a mi obra…, la Dra. Lilia Granillo de la UAM escribió sobre nosotras
las escritoras de ciencia ficción… es continuo y muy gratificante ver que no me
olvidan. O sea que tengo dos hogares. Estoy aquí y allá.
Pregunta
A partir de tu regreso a España ¿qué libros empezaste a publicar aquí?
Respuesta
En
realidad, antes, Pilar Daniel estaba en la lucha de la traducción y publicación
de Els Fills de l´Atzar. También La
Asociación Tirant lo Blanc de México se relacionaba con la Asociación Tirant lo Blanc de Catalunya
y nos publicábamos cuentos mutuamente y editamos un libro en conjunto. No hay
una fecha de inicio en España puesto que intercambiábamos material. Quizás el
primer libro publicado en España fue La
Nimiedad, (2006) novela realista que se publicó en Barcelona pero que
también tuvo un distribuidor en México, donde vivíamos.
Después conocí a José Joaquín Ramos de Erídano
y él se lanzó con toda mi obra: Publicó varias novelas y también cuentos y
artículos en su revista digital Alfa Eridiani. Fue estupendo.
Pregunta
Has escrito obras de otros géneros que no son ciencia ficción ni fantasía,
¿verdad? Nos interesa saber también sobre ellas.
La
Nimiedad, novela realista, donde hablo un poco del valor de la
imaginación frente a la memoria, un poco de la España profunda, un poco de la
guerra civil y sobre todo de la lucha por construir los sueños.
Policiacas: Lluvia sobre el barman, ambientada en
Barcelona. El vuelo de la gaviota ambientada en México.
Vampiros:
Dorian Eternity ambientada en México
Pregunta
En tu obra hay Space-Ópera y fantasía heroica. ¿Qué autores y obras te han
inspirado más?
Respuesta
Mi
primer contacto con la fantasía no
fue propiamente de con la fantasía heroica: eran los cuentos que nos contaba mi
abuelo, sobre El Cid Campeador, los Siete infantes de Lara, Viriato… supongo
que él los leía y luego nos los adaptaba.
Pero recibías un mundo de caballeros, de
conceptos de honor… Leía libros de ambientación medieval… El primero que me
compré, de cría, fue Los caballeros del rey Arturo. Aún lo
tengo.
Bien, pues es ese universo trasladado al futuro.
Nunca leí Space Opera; cuando escribí una y H. Pascal
me dijo que había escrito Space Opera le dije que nada de eso, que era una
novela de aventuras espaciales, con un héroe y una heroína muy definidos. Luego
analizamos y ¡vaya, era una Space Opera!
Luego he leído space opera que me ha interesado
mucho, como Rimrunners de C.J. Cherry
o las cuatro divertidas obras del ciclo
de Tschai de Jack Vance. También Los
Viajes de Tuf, de G.R. Martin y Demonios
en el cielo de Gabriel Bermúdez Castillo.
Pregunta
¿Por qué te sedujeron los personajes de Al Braker y Whissita Lena Reed?
Respuesta
No
sé, bien, bien… si me sedujeron. Llegaron para quedarse. En algunas ocasiones
en algunas revistas me dijeron ¿tienes
algún cuento de aquellos dos personajes? o ¿cómo se conocieron?
En La
Crisálida en realidad no parecía que hubiera un futuro para Al Braker, pero
los amigos que lo leyeron reclamaron. “¡Pero no puedes acabar con él!” –me
dijeron-. Y seguí.
Pregunta
Tus mujeres son libres e independientes, fuertes y valerosas, con frecuencia
exploradoras y guerreras, pero al mismo tiempo pueden compatibilizarlo con el
interés por la literatura y el conocimiento. ¿Cuáles de tus protagonistas son
las que más te gustan?
Respuesta
Whissita Reed. Por todo lo que
señalas. Es valiente, aventurera, libre; le interesan los motivos de la guerra
y estudia sobre ella. Estudia e investiga. Está muy bien situada en su propio
mundo.
Mariana,
la bruja de La soledad de la meiga, cuento
publicado en Goliardos y A la sombra del Linaje. Es sabia, es tranquila. Lucha por sus
conocimientos con fuerza y también sabe situarse en su propio mundo.
Pregunta
En tus narraciones aparecen una serie de
valores éticos como el pacifismo, la libertad e independencia de las mujeres de
las que hemos hablado antes, la pasión por el conocimiento y los libros, el
rechazo a las diferencias entre las criaturas por sus condiciones diversas…
¿Cuáles son los relatos y novelas donde crees que esos valores éticos han
quedado mejor elaborados literariamente?
En A la sombra de Mercurio, Braker
tiene los sentimientos de una persona con prejuicios pero actúa defendiendo la
libertad y el respeto a otros (le gusten, o no, esos otros). Se plantea la
ética clónica. El piloto, es bastante bestia (perdón por la expresión), pero no
busca pelea, y defiende la libertad del individuo: “Nadie sube a mi nave si no
lo desea”, rechaza los experimentos con seres humanos.
En El espacio Aural, la idea de libertad parece imposible en
la Metanauta. Pero estén en el universo que estén, los personajes buscan la
libertad.
¿Clonalidad?
en cuanto a las diferencias entre los seres.
La
guerra de Puerto Space, Whissita está en contra de la
guerra, ama el conocimiento, busca la paz.
Pregunta
Muchas gracias, Blanca, por responder a una entrevista tan extensa. ¿Quieres
añadir algo más?
Respuesta
No puedo despedirme sin citar a Philip K. Dick que me inspiró un antes y un
después en la literatura de Ciencia Ficción.
Gracias por tu interés en mi obra y deseo que sigas
tu labor de escritora, ensayista y difusora de la Ciencia ficción.